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Es poco habitual que alguien que compra un automóvil pregunte por el chasis. Generalmente se le da más importancia al motor, al equipamiento o a la estética. En el caso de los camiones las cosas son diferentes. Todo comprador ha de informarse bien de las características del chasis de un camión, ya que soportará el peso de la carga e influirá notablemente en la conducción.
¿Cómo es el chasis de un camión?
El chasis de un camión es muy diferente al que se utiliza en los automóviles particulares. Es importante entender qué es el chasis y los distintos tipos que se pueden encontrar en los vehículos que circulan por las carreteras. A continuación, te explicamos cuáles son los más utilizados.
Chasis con carrocería separada
Los que sirven de base para los camiones son principalmente los chasis de carrocería separada. La característica principal de este tipo es que en él se soportan todos los elementos mecánicos, siendo la carrocería una segunda parte independiente del vehículo. También es común en otros vehículos como grúas, todoterrenos, autocares y algunas furgonetas.
Chasis con carrocería autoportante
Los coches y furgonetas pequeñas se construyen en su mayoría de este tipo. La carrocería se une al chasis por medio de soldadura. En este se soportan algunos elementos mecánicos y piezas desmontables, como las puertas, los paragolpes o el capó.
Plataforma con carrocería separada
Se crea un chasis con diferentes piezas soldadas entre sí. Este soportará la mecánica y el suelo, a los que se unirá una carrocería independiente por medio de tornillos. Muy pocos coches de carretera llevan este sistema.
Plataforma y carrocería monocasco
En este caso, todo el conjunto forma una sola pieza, siendo imposible la sustitución de forma independiente de ningún elemento. Elementos como el capó, las puertas o el paragolpes se colocan aparte.
Características del chasis de un camión
El chasis de camión de carrocería separada, también conocido como chasis independiente sobre bastidores, es el más común en este tipo de vehículos. Es decir, se puede ver una estructura metálica en la parte inferior y otra superior, independiente, que trabaja por separado.
Una de las características de este sistema es que, en caso de ser necesaria una reparación o sustitución, se puede separar con más facilidad. A continuación, será mucho más sencillo montarlo de nuevo y dejarlo como nuevo sin que la estabilidad se vea alterada.
Los camiones menos pesados pueden utilizar el chasis autoportante o el monocasco. Aquí la carrocería estaría unida, formando una sola pieza. Aunque se conducen con más facilidad, no son los más prácticos para transportar mercancías variadas. En muchos casos se tiende a la sobrecarga, que deteriora los componentes con mayor rapidez y acorta la vida útil. Solo son recomendables si se va a llevar siempre lo mismo y en la misma cantidad.
Cuidados del chasis
Una alteración del chasis por accidente, por mal uso o por una reforma incorrecta, puede provocar averías, y lo que es aún peor, puede convertir el vehículo en inseguro. Estas son algunas de las recomendaciones que hay que seguir para mantenerlo en perfecto estado.
Evitar usos inapropiados
Lo primero que hay que tener en cuenta es la necesidad de respetar el uso para el que está destinado el camión. Si no se respeta, podría estropearse a nivel estructural, desequilibrarse o sufrir otro tipos de daños, además de poner en riesgo la carga y al mismo conductor.
Controlar el peso
Uno de los mayores problemas a los que se enfrentan los camiones es el exceso de peso. Comprar camiones con chasis diseñados para menos peso es más económico, por eso algunas empresas recurren a esta opción. Las sobrecargas también suponen un grave problema de seguridad, además de deteriorar la mecánica y la estructura.
No manipular si no es por expertos
Muchos camiones pueden adaptarse para darles diferentes usos y así llevar más variedad de carga. Esta es una buena opción, pero siempre debe de realizarse por personal cualificado y bajo homologación. Solo así se cumple con los requisitos legales y se garantiza la seguridad de los ocupantes.
Engrasa el chasis
El chasis ha de ser engrasado como parte del mantenimiento. Esto evita que ocurra un deterioro prematuro y evita molestos chirridos. Si se percibe que el engrasado se está perdiendo eficacia o se escuchan ruidos, hay que llevarlo a un taller.
Realiza inspecciones visuales
Las inspecciones visuales son muy importantes. Si se perciben grietas en el metal, óxido o bultos en la pintura, hay que tomar medidas inmediatas. Dejarlo para más adelante podría provocar averías graves y un deterioro más rápido de los componentes.
Ahora ya conoces al detalle las características más importantes del chasis de un camión. Con esta información te será más fácil encontrar el vehículo más apropiado para tu negocio. Si ya dispones de un camión y piensas hacerle modificaciones o restauraciones a la carrocería, cuenta con Auxiliar de Carrocerías. Nuestros profesionales te darán el asesoramiento que necesitas y realizarán un presupuesto ajustado a tus necesidades.